Es claro que la representación de la serpiente enroscada en la vara se asocia a Kundalini, pero también a la sanación. Ya sea como símbolo de Esculapio o en la vara de Moisés curando a los israelitas, la asociación de la serpiente con la medicina es muy antigua y no sólo en la India.
En el libro Kundalini Yoga de Sivananda el swami explica claramente el trabajo de sanación con el prana. Si bien no detalla cómo el discípulo debe acceder a la Fuente sí lo menciona explícitamente como parte del trabajo energético: «conéctese con el Hiranyagarbha (útero dorado) o con el Prana cósmico e imagine que la energía cósmica fluye a través de sus manos hacia el paciente»
Es claro que si sabemos conectarnos con el Huevo cósmico también lo hacemos con la Shakti universal, origen de toda vibración, energía y sonido.
De esta manera la sanación a través de la Shakti, entiéndase de Kundalini, es algo antiguo y una realidad palpable para los practicantes. Este tipo de sanación combina prana, mantras, sahumerios, limpieza de nadis, masaje energético y armonización de los chakras. Asimismo lleva un trabajo interno de pranayamas, meditación y visualización de yantras.
A Hiranyagarbha también se le llama «Aquello», el huevo flotó en el vacío y en la oscuridad hasta que se dividió en dos y empezó la creación. Es el Alma del universo o Brahman, con eso se conecta el sanador.
Aprende más de estas técnicas.
Daniel Curbelo
Imagen: Pintura Pahari del huevo cósmico dorado Hiranyagarbha de Manaku, c. 1740

Tags:
No responses yet