DE SHAKTI A SHIVA
Una de las enseñanzas que comparten el Tantra, el taoísmo, el sufismo y la Alquimia occidental es que muchas veces es más fácil llegar a la conciencia a través de la energía femenina. Llegar a Shiva a través de Shakti, eso lo explica el Vijñana Bhairava Tantra:
«21. Así como se reconoce el espacio iluminado por los rayos del sol, así se reconoce a Shiva, gracias a la energía de Shakti que es la esencia del Ser.»
El texto insiste en entrar profundamente en la intensidad de los estados que se presenten para hacer ese recorrido:
«101.En estado de extremo deseo, de ira, de avidez, de ofuscación, de orgullo o de envidia, penetra en tu propio corazón y descubre la quietud que subyace a esos estados.»
Esto es totalmente cierto, es cuestión de llevar toda la atención al corazón y veremos que allí hay algo intocado, algo que subyace. Pero vayamos al recorrido a través de la unión sexual:
«68. Cuando practiques el ritual sexual, que el pensamiento resida en el estremecimiento de los sentidos como el viento en las hojas, accede entonces a la felicidad espacial del éxtasis amoroso.
69. Al inicio de la unión, permanece en el fuego de las energías liberadas por el goce íntimo; fúndete en la divina Shakti y continúa quemándote en el espacio sin conocer las cenizas al final. Estos deleites son en realidad los del Ser.»
Es claro que esto se aprende manejando la atención, suavemente, amorosamente. Los sufis también dicen: «al contemplar a tu amada permite que el fuego te queme, entonces en esa embriaguez te sumerges en el deleite del amor divino». Son palaras que ambas filosofías usan: goce, sabor, deleite, dicha; y que ambas asocian con la Conciencia.
Hay que aprender a no fragmentarnos cuando llega esa tremenda energía. Porque si nos observamos veremos que siempre estamos de alguna u otra manera resistiendo la intensidad de la esencia de nuestro Ser, que es la misma Divina Shakti.
Daniel Curbelo
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