Según Eliphas Levi las cuatro ciencias ocultas son: Magia; Alquimia, Kabalah y Medicina oculta.
La magia es el arte de manejar las energías internas y externas de acuerdo a la verdadera voluntad. El objetivo de la alta magia es entrar en la vivencia de la totalidad yendo más allá del personaje social que hemos creado, reconociéndonos como fuerzas de la naturaleza y no solamente personas.
La alquimia es la disciplina que estudia y practica la auto-transformación del ser humano con el objetivo de encarnar la divinidad en este mundo. Volverse un «hombre de Tao», uno que ha encarnado la conciencia crística, un osirificado para los egipcios, etc.
La kabalah es una tradición que si bien se vincula a la religión judía bebe de otras fuentes y por eso mismo muchos judíos reniegan de ella. Es una disciplina que enseña al hombre el camino de regreso a la conciencia no-dual, el Ain, la nada del Absoluto. Enseña el viaje por los mundos internos, la magia de las letras, de los planetas, de las jerarquías espirituales, etc.
La medicina oculta es todo lo que tiene que ver con la sanación, el arte de sanar, la medicina de las hierbas, preparados y la sanación energética.
Cualquiera de las cuatro disciplinas trabajan sobre la conciencia y son absolutamente complementarias. En todas ellas encontraremos auto-conocimiento, meditación, indagación interna, etc. Dice Eliphas Levi:
«El arcano universal, último y eterno secreto de la alta iniciación, está representado en el Tarot por una joven desnuda que no toca la tierra más que con un pie; tiene una varita imantada en cada mano y parece correr dentro de una corona que soportan un ángel, un águila, un buey y un león.
La comprensión de esta figura es la clave de todas las ciencias ocultas.»
Daniel Curbelo
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